SANTANUZA

Y ahora un alma como la tuya. Bien por vos. Mejor por nosotros.
Colores nuevos y un proyecto de amor. 
Se amplía tu energía espiritual. Mientras, todos tus duendes cantan, brillando y bailando un ballenato alrededor de la mesa.
La murga llora! Llora por su hijo que crece y crecerá. 
Se florean los taninos que acompañan a tu sonrisa y en algún balcón, en cualquier lado, ríe un cactus.
Flor de mariposa!
Tu tiempo y tus trastos, una corona de cuerdas de nylon y una espada de macramé como boleto y escudo.

Guarden calma mirones y patoteros (opinólogos) abstemios! Frutos de la ternura para ustedes!
Besen sus bocas y escurran sus ojos que siempre una guitarra salará los reflejos de la noche en la ciudad.

Salud gitano! Te abrazamos yo y mis palabras que de ninguna manera, en ningún universo posible (o no), pueden retratar (ni siquiera sugerir) un pasado compartido y sus propios sabores. Solo pueden adornar las fotos que nadie sacó y emborrachar los secretos que morirán con nuestros cuerpos.

Viejos brujos de los montes: preparen sus fogatas.
El amor, aun en invierno, toma una dimensión nueva y ambiciosa.
Levanten sus vasos que dios duerme y nosotros estamos de festejo!

Agua tibia.

Dos trompetas que te despeguen las rodillas.

Que te calmen como un té

y te iluminen como lo hace el sol.

Si,te hace caricias la miel de tu niñez.

Ahora te envuelven las nubes, te llenan de brillo y podés dormir bien.

Dejá esas cejas gastadas descansar y

que te pase por arriba un elefante de algodón.

Son tuyas las horas que vienen.

Prendéle una vela al que llora con vos.

Tan solo.

Listo,ahora que puedo volar, depende de mi llegar.

Ahora que no miento más y tengo tiempo para almorzar.

Me voy a querer vestir siempre pero, a veces, me voy a tener que arreglar con lo que sienta.

El calor del sol no es suficiente! Prefiero ser color y sentir la lluvia,prefiero, elijo, caminar.

No le pases esa cara a nadie, guardate ese puchero para vos.

Ya te perfumaste bastante. Si no querés bailar, bailo yo.

Dejá que se haga de noche, todos vemos mejor.

La piel está para adornarla. Las uñas para perder el control.

Siete mareas me dejaron hambre.

El último enero no me trató mal.

Los duendecitos que vos dibujaste

se hicieron cargo de nuestra pasión.

No te dan ojos para llorar.

No aprendés a hablar para escucharte.

No son las cosas tan desagradables.

No vivís mejor por vivir más.

Om Mani Padme Hum

Sobre tu espalda que haya besos y tierra negra, mojada y fértil donde sembrar flores y canciones.

Que haya nubes de colores y un gran sauce barbudo donde dormir la siesta.

Ni dedos, ni manos.

Ni sangre, ni llanto.

Nunca más el peso violento y fanático del tiempo, ni la inmunda culpa de la historia.

Nunca más un cuervo babeándose en tus hombros.

Nunca más cenizas, de otros fuegos, que congelan.

Que el pájaro policromo besará la flor de loto y esta se abrirá, no solo de día, para enamorar y enseñar. Para educar y disfrutar.

Y así, momento a momento, seremos cristal, humo y mar.

Amarillo.

Un papelito amarillo y cuadrado por igual en todos sus lados le hace burla a los camiones que se escuchan desde la ventana que no deja entrar el frío y por eso nos dormimos mientras leemos lo que escribo en un papelito amarillo y cuadrado por igual en todos sus lados.

Delta sol.

Me sale un sol que me refleja.

Desobedecer a estos pobres tristes.
Sigo a una mosca.
Me enseñaron a bailar.
Que picardía.
Vendremos cantando.

Solo el hombre puede atribuirse como triunfos la razón y la libertad.

Quisiera ver crecer algo.

Ni una almohada más.

Sentarme en una escalera.

Es fácil.

Poema que me contó una mosca.

Lluvia de sol para ti, Orejón.

No ha querido pretender, verse ni serse fiel:

“la luna es una, me importa un pedo”

Valla y corrija esos modales, culón entusiasta.

Tiene moho en los zapatos usted, el peor anfitrión.

Se da un buen baño y se vuelve a acostar.

Siete millones de aplausos y ninguno con amor.

El rosa no es promiscuo,

usted no sabe leer.

Silvio Silvante.

En la misma oscuridad que escondiste tus problemas
ahora todos se pelean por armarse de valor.
"Suelo ser un poco corto, enanito y mentiroso
cuando se me ven la cara, la nariz o los ojos".

Trajiste tu colchón, puede ser brava la noche para vos.
Nos veamos o no, te advierto: no me cae bien la sangre.
Motivate con lo que quieras pero lejos de este lugar.

"Y un garronero como usted que anda siempre hasta los pelos".

Vamos a suponer que no es nada serio, un loco que busca joder.