viernes, 24 de diciembre de 2010
Antes que lleguen todos.
Recorto, ligero, mis plumas más añejas.
Guardo el sol en el ropero, con el resto de mis celos.
Y después de quince intentos me acostumbro a no bostezar.
Tengo la bolsita lista, con sus caras, con sus risas.
Remedio para la ignorancia, el sueño y la humedad.
Ojalá que el tiempo ande bueno y que si llueve podamos nadar.
El deseo más grande que anhelo es andar con ustedes un año más.
viernes, 10 de diciembre de 2010
Siempre Diciembre.
Con un sombrero en la mano y un nuevo clavo en la pared.
Mientras sueño con un jardín que amenaza con ser perfecto,
me perfumo para el fuego, el sol, el agua y volver a la ruta otra vez.
Diciembre.
Para buscar luz en mi silencio e inocencia en mi voz.
Yo, más erguido que en otros meses, más predispuesto a idealizar.
Diciembre.
Que atiende con delicadeza toda mi corteza.
Pero mantiene una distancia insufrible con el riesgo de descansar.
Diciembre.
Fugaz, rápido, ligero, momentáneo.
Fluye.
Diciembre.
Vuelven gritando, excéntricas, las musas de siempre.
Y con ellas repaso lo que alguna vez sentí, fumo y tomo vino.
Diciembre.
Ojalá me conozcas en estos días.
O yo te vaya a buscar.
Diciembre.
Fiero capricho del año.
lunes, 29 de noviembre de 2010
El asesino de viejas.
Todos esperamos haciendo la cola en incontables situaciones a que la señora de la tercera edad que encabeza la fila se decida a pagar lo que indica el tablero del cajero o a encontrar los doscientos treinta pesos en monedas de veinticinco centavos que lleva en un monedero dentro de una carterita sumergido en un bolso repleto de entes.
Todos fuimos, alguna vez, toqueteados y aturdidos por manos ajenas que buscaban convertirnos en un adorno de mesa ratona.
He aquí la breve leyenda de cómo una persona ordinaria se bautizó en nuestro redentor, de la persona que supo (o intento) poner un alto a nuestro sufrimiento y decidió exterminar de la faz de la tierra a las mujeres de más de cincuenta y siete años que transitan libremente por la vía pública.
Por razones obvias estoy obligado a reservar el anonimato de nuestro protagonista.
Vayamos a lo que nos concierne.
“No amigo, no me quedan más chupetines de naranja, se los llevo todos esa vieja que salio recién”. DETONO, explotó, por dentro murió y renació. El punto de inflexión para darse cuenta cual era su objetivo en esta vida.
El, al verse sumergido en este dilema recorrió varios caminos en su pensamiento.
Pensó que el problema real de su contienda con las señoras entradas en años se debía a que podían salir libremente a la calle. No le molestaba que vivan, dentro de su casa.
Entendió que matarlas a todas era imposible, no se podría salir impune de esa actividad. Además iba a suponer demasiado tiempo y dinero, definitivamente no.
Se le ocurrió que podía poner de ejemplo a alguna señora que se encontrase sola (para minimizar el daño colateral), para dar el aviso las demás. Prenderla fuego, ahogarla o simplemente envenenarla. Pero se dio cuenta que el homicidio físico, aunque era la mejor opción, resultaba algo inconveniente, política y económicamente.
Entonces, ideó un plan para lapidar a las damas añejas sin siquiera tocarlas.
Aprendió a llorar, exquisitamente. Perfecciono el arte del recuerdo emotivo conviviendo con monjes maoístas durante 4 años. Podía conseguir transferir la sensación de lamento y sufrimiento a la persona que el quisiera. Entonces, cuando una hembra de antaño lo irritase lloraría, gritaría, gemiría hasta que esta se preocupe por él y en ese instante el transportaría su repulsiva emoción a ella y la misma viviría penada al menos un par de días, lo cual cumpliría el objetivo de no interferir en sus planes.
Perfeccionó su habilidad con el tiempo y la experiencia, y también descubrió que si uno intenta hacerle cosquillas a las matronas que ya tienen suficientes años como para andar obstaculizando los flujos normales del desarrollo de la vida diaria, se rinden y además de dejar de fastidiarte pueden suministrarte dinero, comida o en su defecto lo que uno necesite.
Vivió feliz una vez que logró controlarlas, vivió durante noventa y cinco años en ocho países diferentes.
El transmitió este conocimiento a muchos a lo largo de los continentes y los mares. Muchos que también enseñaron esta pasión a otros.
Las viejas siguen existiendo y nosotros nos seguimos fastidiando. Pero ahora son ellas las que cargan con la culpa.
REVISTA La Sed Verdadera nº2
jueves, 18 de noviembre de 2010
Sino no
estaba perdiendo el tiempo, yo, a mi manera.
El río que trajo este sol, se volvió piedra y barro
se lamentó al dejarme, seco y en oscuridad.
Cierro las manos, miro hacia todos lados,
me escondo del frío y acepto mi cruel destino
Voy a jugar con fuego y quizás me queme,
si tengo suerte, quizás me queme.
No lo pude agarrar, lo tuve que escribir.
Se fue gritando solo, y me dejo cantando a mí.
Un rato más, hoy me voy a asegurar
que todos bailen juntos y que nadie se valla a dormir.
Voy a jugar con fuego y quizás me queme,
si tengo suerte, quizás me queme.
Va a ser como decís, nadie se va a acordar
del sueño que compartimos y el que vamos a soñar.
Va a ser como vos dijiste, las nubes se van a marchar
vas a volver solo a casa, solo, ¡y sin protestar!
Voy a jugar con fuego y quizás me queme,
si tengo suerte, quizás me queme.
jueves, 4 de noviembre de 2010
Quebrada (zambita).
Como quien siente la lluvia amanezco floreciendo.
Preparando agua caliente y dando gracias por el sol.
Un saludo a la bandera, no te olvides la guitarra.
Camino de tierra y pasto, sin relojes ni farol.
Me voy temprano pa’ la quebrada.
Llevo una nube y un alfajor.
Un alfajor pa’ darle a la Tana.
Una nube pa’ taparme del sol.
Saltando alambres y charcos con los pies llenos de barro.
Afinando algún aplauso que va levantando al barrio.
Hicimos un barrilete, con la Bicha y el Santiago.
La vida se me hace hermosa en casa de los Bolaños
Me vuelvo de tarde de la quebrada.
Me traigo una estrella en el corazón.
Estrellita santaluceña
que nos vio andar de dos en dos.
Así es más fácil, pensé volviendo, teniendo nada y todo adentro.
Vivir del día, la noche, el viento, vivir queriendo, vivir contento.
Pido a la virgen del Itatí y por las dudas saludo al gil.
Pan para todos y una cosa mas, cuida de Toto y de su mamá.
Pasate algún día por la quebrada,
no olvides traerte un alfajor.
Si se te enfría el alma hermano
te esperamos con mate de yerba y cedrón.
domingo, 31 de octubre de 2010
Retruco.
Trabajo veinte horas por día de maniquí en un local de computación.
Me como un sánduche de tornillos.
Prendo la tele a gritos.
Tomo perfume.
Desarmo una regla.
Aprendo a cantar la marcha de San Lorenzo en alemán.
Me tatúo los riñones.
Duermo arrodillado.
Me compro un submarino.
Pinto el obelisco con marcadores.
No camino más.
Le enseño a leer a un durazno.
Desarrollo otro sentido más.
Me depilo las cejas con cinta scotch.
Me dejo de escribir estupideces y me acuesto que es tardísimo, está bien.
Tórtolos bávaros.
El, que quiere entender todas las canciones de Spinetta y cree haber encontrado en el humo del cigarrillo las respuestas a todas sus preguntas.
Ella, de la que no sabemos nada salvo que se tuesta al sol y tiene olor a vainilla, esta decidida a contar las estrellas y ponerle nombre a todos los sauces que se cruce en su vida.
¿Hace falta que se conozcan?
Aplaudamos fuerte, quizás el deje de mirar el cielo buscando ver algún arco iris y ella pare de madurar.
Y así se puedan mirar.
De verdad.
Recién ahí.
Cuando hayas llegado tan lejos que pienses en volver.
Cuando por delante te quede el agua, el barro, la nieve o el fin, arriba el sol o la luna, y atrás las personas.
Cuando, por fin, hayas decidido tu color favorito, y tu número de la suerte.
Cuando te hayas rebelado y amigado con tu alma y no te haga más fuerte el dolor.
Cuando te hayas mojado ya todas las partes de tu cuerpo y te acuerdes más de cien canciones.
Cuando hayas podido aprender a recitar tres poemas de memoria.
Cuando aceptes la oscuridad y el frío.
Cuando entiendas por qué te espero.
viernes, 22 de octubre de 2010
cadáver II
Se armó con linos y telas viejas un gran caparazón donde sería capaz de vivir cómodamente el resto de su vida.
Bordó en su pecho algunas verdades que esperaba no olvidar, arrancó de su cabeza todo el pelaje que ya no usaba y emprendió viaje.
Capaz por su imposibilidad de volar o su ambición humanoide de perpetuar por siempre en el recuerdo popular fue que decidió caminar.
Para saldar sus propias cuentas, para poner orden a sus ideas, para volver a ver como una vez vio.
Rojo, celeste, violeta, amarillo, naranja, rojo otra vez. Su caparazón metamórfico fue visto por cientos de personas y seres que le obsequiaron un instante de su memoria, en algún otro momento de su vida, haciéndolo eterno y feliz.
Cadáver exquisito,Revista La Sed Verdadera
jueves, 16 de septiembre de 2010
Cuatro a eme.
Lo vi claramente durante dos segundos, como cuando se recuerda una cara, un gesto, una melodía. Y es tan intenso.
Me acostumbré a no malgastar tiempo en recorrer de lleno el camino que me lleva a la calma. A no invertir en equilibrio ni buscar que mi matriz sea sensible como un todo, que tenga la capacidad de crecer como crecen los árboles, por sus copas y por sus raíces. Por lo mundano y terrenal como por lo divino y vertical.
Admití que mi propio idioma es nulo. Que puedo dialogar con ser vivo que me proponga, a la manera que lo asimilen mis sentidos, pero no con los rincones de mi razón que se destiñeron, que hace tiempo ya declararon su independencia y por motu proprio se mantienen con vida.
Esta mutación de imágenes a palabras es solo para apaciguar un frió que quema las manos. Para arrancar intencionalmente la corteza rancia de mis tripas que, como flores de un vergel en llamas, sufren. Sufren por ser mías, no por ser tripas.
Y sin aliento ni asombro vuelvo a acostarme.
El peso de mi cabeza, que cede ante la ley de la gravedad, maquilla el impulso descontrolado de mi manía por atender a los pequeños charcos de mi personalidad que lloran de soledad, con la idea de que mañana leeré esta confesión como una tesis verborrágica acerca del insomnio y la maldición de tener que madrugar.
viernes, 3 de septiembre de 2010
Hoy
Vientos superiores a los veinticuatro kilómetros por hora.
Se va a terminar de hacer de noche (la gente descorazonada y ridícula le dice oscurecer) a las seis y treinta y tres pe eme.
Un poco de irritabilidad, por el sueño quizás.
Con algún insulto nos sacamos de encima las ganas de dar fin a alguna vida que habite esta tierra.
Una pizca de mala suerte, una baldosa floja y usted puede estar seguro que este fue el día más feo (estética e históricamente) del año.
Léase que el autor de esta declaración fue poseído por un espíritu de antaño, ambicioso y descerebrado que transita por la Avenida Callao en el horario de la siesta. ¡Cuidado!
jueves, 26 de agosto de 2010
Más de madrugada
por arriba del río.
En reposera espera un hombre el mar
tensa la tanza, se levanta y se vuelve a acostar.
El cielo se divide en mil y cada parte tiene su color.
Todas las nubes forman un corazón.
Mis pensamientos se van para el cielo.
Las últimas locuras del cuore salieron a naufragar bien adentro.
Toda una vida empezando a vivir.
Una frase por cada momento.
Hacerse amigo del paso del tiempo.
Volver más de madrugada.
Olor a puerto y a documental.
Una manzana y una mandarina para decorar.
Dan sombra los árboles sin cobrar.
Las palomas no vuelan, no hay de qué escapar.
Miren las estrellas que lindas que están.
Todas las nubes forman un corazón.
Con arena está escrito lo más importante.
Que las penas ajenas aprendan a navegar contra el viento.
Toda una vida empezando a vivir.
Una frase por cada momento.
Hacerse amigo del paso del tiempo.
Volver más de madrugada.
¡Casablanca!
Si, pero hay que elegirle el nombre no el apellido al bebe, gordo.
Ah, esta bien. ¿Garfield?
lunes, 23 de agosto de 2010
Chapeau
Se mezclan mis ganas de creer
con el concreto que quemé
y mi envoltura de papel.
Vuelvo a la fila otra vez.
Me salvan las nubes que lloré,
los días que pierdo la conciencia,
las noches que no quiero volver.
Y sin embargo salió un verso en defensa del sueño,
una lágrima de un recuerdo, un pájaro multicolor.
Bienvenida bendita adicción de dar por muerto lo que no pasó,
de sepultar los intentos del tiempo que traen calor.
¡Más de lo mismo otra vez!
Otra canción para después.
El ancho solito no hace nada.
Malos modales pa’ aprender.
Bajo del barco otra vez
y me estaciono para ver
como se escapan los abrazos,
como se odian mis dos pies.
Y por las dudas decime de qué lado dejo la almohada,
cuando compartamos la cama, no me quiero enamorar
Hasta mañana maldita ambición de buscar fuego en el mismo rincón
Donde la calma serena y las flores no saben quien soy.
miércoles, 18 de agosto de 2010
Antofagasta de la sierra.
A Cástulo y Angelita.
Delante del viento y encima del sopor
afina como un cebo sigiloso y discreto
esta señora que baila todo el verano, machada, y duerme en invierno, de frío.
Por la mañana abre sus ventanas para secar su pelo mojado por el rocío y,
en un acto fugaz, permitir al sol pintar las calles y el adobe con sus manos
mientras se despabilan bostezando las uvas y las llamas.
Entonces los álamos avisan silbando donde van a sombrear.
De tarde salen a pasear los pequeños monarcas del desierto,
que, a la misma hora, siempre aparecen en sus mulas queriendo reconquistar las tierras que aburren a sus padres y en ese instante se vuelven dorados todos los colores y hay que abrigarse
y, luego, complacer a los principitos con chocolate y masitas.
De noche es más puna que luna y más luna que dios.
Cuando media hora después de las tres se apaga hasta la última luciérnaga,
recién entonces, se puede ver claramente.
Se ve que hay más estrellas que acá, sea acá en cualquier lugar, menos allá.
Lo único de lo que hay que cuidarse es de no llegar a pensar que todo es real.
Puede traer confianza, risa y tranquilidad.
Lloré una noche por todo, por creer que no necesitaba nada más.
Lloré, bien acompañado y en la oscuridad.
Lloré de felicidad.
Y ahora canto para no pensar que debo aprender a volver.
No duermo por no soñar que estoy allá otra vez.
Y Angelita me viene a despertar.
Hizo buñuelitos de verdura como ayer.
Se sentó en el patio, a la sombra, a tejer.
Fotografía:Tomás Hansen
viernes, 13 de agosto de 2010
Sancocho.
Si lo lógico, las leyes, los estatutos, los códigos, las legislaciones fueron creadas para protegernos a nosotros mismos (de los demás y de nosotros mismos) ¿Qué nos protege o ampara de la hipotética frustración desencadena por sucesivos encuentros infelices, reales o ficticios, procedentes de experiencias, accidentales o intencionadas, que hayan permitido la libre interpretación de un estado de satisfacción como un axioma especificado y (aparentemente) conocido como amor? Al que jamás ninguna ciencia, doctrina, escuela, disciplina, academia ni cualquier orden u organización que haya contemplado el estudio y/o/u la observación de hechos y acontecimientos ha podido analizar, mucho menos razonar.
¿Es universal introducirse en un mundo anónimo a la ciencia y el razonamiento? ¿O es el mero deseo de la aventura por aventura misma, íntima al genoma humano que busca participar, definir y sentir lo que hace?
¿Puede haber algo más que la intención enceguecida de buscar la calamidad y el masoquismo, suponiendo los intervalos de este como las expresiones de amor?
¿Existen otras razones para la búsqueda de alcanzar, definir, sentir, juzgar, tocar, vivir, probar el amor?
¿Existen otros entes que nos provoquen el deseo de amar más allá del miedo a la soledad o la atracción física?
Nubes con forma.
Alguna canción.
Ver atardecer.
Los perfumes.
Un invierno.
La caricia.
Cada beso.
Un color.
Árboles.
Reírse.
Un fa.
Dios.
Vos.
Yo.
lunes, 9 de agosto de 2010
Mejilla verde o el secreto ídolo del detergente.
Reconoce su apego por la zona sur pero se aviva considerando las enormes desventajas astrológicas que exhibe vivir en Avellaneda, urbe vecina y cómplice, y vivir bajo la dicotomía de los clubes de futbol.
Atormentado por el paso de los años y el incremento de los días de mucho calor fuera de la época de “verano”, Eufemio ocupa su tiempo restaurando impresoras industriales y sacapuntas.
Su obsesión germenofóbica y el idilio que mantiene con el dadaísmo lo llevan a convivir de manera infame “entre el cepillo y el frontón” y a considerar el amor, visto como una manifestación recíproca y para la cuál se necesitan dos personas (preferentemente humanas), como un síntoma de aburrimiento y desesperanza personal.
A una de sus luchas en contra de la suciedad y a favor del cuidado personal le debe su seudónimo, que lo acompaño durante todo el colegio secundario y su juventud. Pretendiendo destronar el imperio de acné que castigaba su tercio inferior de la cara, ideó una amalgama de salvia, bicarbonato de sodio, acelga, palta, leche condensada y barniz. Las consecuencias obvias de unos cachetes indecorosos y la imposibilidad de faltar al colegio le valieron un apodo no muy cálido. El dice que de chiquito le fascinaba el personaje de Linterna Verde y no lo podía pronunciar bien, entonces en su casa le decían Mejilla Verde. Hoy es verdad la explicación que él elija contar, no el acontecimiento histórico.
Nunca encubrió su fanatismo por Torcuato di Tella, obviamente exceptuando las ideas filantrópicas del italiano creador del SIAM que una vez insultó a Mussolini. El padre de Eufemio puede haber llegado a conocerlo (a di Tella).
Durante mucho tiempo fue voluntario de un grupo anónimo sin fines de lujo que se interiorizaba en el estudio de las similitudes entre el Kama Sutra y la revista Anteojito.
Puede decirse o pensarse que su mayor logro fue haber sido electo miembro simbólico del 3º ateneo latinoamericano de intolerantes a la glucosa, deber que le permitió conocer el resto del continente y descubrir las enormes diferencias entre el comportamiento de los caninos de las metrópolis cercanas al ecuador y el de nuestros perros.
Hoy sostiene una teoría, propia, que expresa que los lunares pueden cambiar de lugar si uno lo desea.
Sin embargo aún conserva un imperceptible rincón dentro de su existencia que lo enlaza con su lado sensible y humano. Lo emocionan las plazas bien cuidadas, pulcras, y le es imposible contener el llanto al escuchar el Aurora en alguna estación de AM.
Descubrimiento importante
Pensé que doblebé (W) era una palabra o definición más calificada que doubleyou (W), por que doblebé es más acertado ya que parecen más dos V juntas que dos U juntas. Pero ahí está mi error: pensar solo en la apariencia, dejar influenciar mis pensamientos por lo estético cuando en realidad es más acertada doubleyou por que para pronunciarla (a la letra W) se usa el sonido de la U. Como Washington (tranquilamente podría ser Uashington), suenan parecido la U y la W. o también Watts, que sin temor se podría escribir Uats, salvando distancias, suena igual.
Es increíble.
martes, 3 de agosto de 2010
lunes, 19 de julio de 2010
Entre comas.
Parece que trajo, o va a traer, más problemas de los que hay.
Si se me viene complicando volviendo sobrio, por ahora, no me quiero imaginar lo que puede llegar a pasar.
Busqué, ahora, un poco tarde, un sweater de piel de colibrí y las botas para lluvia anti-transparentes. Guarde los zapatos del verano ya, manchados con cloro, vino y miel.
Hace tanto que no hay musa o hace mucho que todo me hace pensar, que no termino ni sin querer una ilusión.
No me alcanza un buen estribillo, no me sirve esta adicción a estar siempre preparado para que venga lo mejor.
Suficiente por hoy. Ya perdí el interés. Escribo por que no quiero que se termine algo otra vez y, a lo mejor, para siempre me guarde esta idea y la disfrace, a su tiempo, la llene de risa y esmalte, la deje en paz.
Y hasta que vuelva el calor esta locura va a tener congelada el alma, y en el próximo invierno, cuando vuelva a necesitar llorar, ya voy a saber por donde empezar a buscar.
sábado, 17 de julio de 2010
Salud, dinero y calor
Una boca busca otra boca por definición.
Tenemos más meses para decidirnos.
Si el viento fuese más quieto no habría incendios.
Y la gente que yo quise no moriría en el intento.
Cazador por cazado, hambre por hambruna.
Letra de enamorados sin el sol ni la luna.
Barbarie de palabras, sujetos sin predicados
Amor sin pluma dedicado a los sueños que me he olvidado.
Más allá de la inocencia, por inercia todo vuelve.
Lo que antes era polvo, hoy, en ningún lado se vende.
Espionaje de las almas, alas para las gaviotas.
Versos limpios e indultados y una vida en ojotas.
jueves, 15 de julio de 2010
Ceviche, Amilcar y un gordo fofo.
Si fueran zapatillas me gustarían, pero parece que se gastó su regalo de cumpleaños (¿número 23?) en un par de sillones (de la casa de alguna abuela) para los pies, el que duerme sin pensar en su cabeza, que flota, y con la bufanda a rayas azules sobre los muslos.
¿Ochentiocho? ¿Ochentiocho? ¡Ochentinueve!
¡Clackksksr! Se caen una monedas de veinticinco o cincuenta centavos al piso por que el nene, rubiecito como el padre, y su buzo del hombre-araña están descubriendo el verdadero poder de la gravedad y la veracidad del segundo principio de la termodinámica. La madre (capaz que lo es) no debería enojarse tanto, peor ella que todavía no tomó ni un vaso de agua del dispenser ¡Es gratis! No debe tener sentimientos.
¡Noventa! Que tal.
¡Si! La última humana que conserva y utiliza lapicera a pluma terminó su revista de crucigramas con la cara de Tom Cruise. Horizontal dos letras: ser vivo más importante (incoloro)…YO ¡Muy bien! ¡Congratulations!
¡Noventiuno!
¡Mameluco, Silvana! Jaja, no. Me opongo. Yo también quiero un apellido esponjoso y aniñado. La Sra. Mameluco por el consultorio tres. Que vergüenza cuando me llamen a mí: Nombre y apellido más que común.
La mujer de la bufanda obvia se dio cuenta que no estoy haciendo ejercicios de bioquímica y que quizás esté escribiendo algo sobre ella (imposible que piense eso) ¿Qué le importa? Vino por el vino.
¡Vazquez Cervelo, Juan Manuel!
¿Cervelo con una sola ele y sin ningún tipo de expectativa acerca de un futuro compartido y ameno?
¡Si!
Ah, hola, doctor.
Pasá, Juan.
lunes, 12 de julio de 2010
Infivierno.
Otra vez mayo me congela los pies.
Viene a escarchar lo poquito que aprendí en verano la desagradable imagen de caminar sin levantar la mirada.
Frío. Por definición es carecer o haber perdido algo.
Etimológicamente es una estación que le declaró la guerra a la primavera, viéndolo bucólicamente.
Recuerdo con mucho cariño un Julio que me enamoré de las frazadas de lana.
Infivierno o invifierno.
Todo lo que sea inflamable se inflama y lo que sea importante se olvida. El canto es llanto y el llanto es por las dudas.
Los animales hibernan. Algunas plantas se endurecen para sobrevivir.
Nosotros esperamos todo el día que llegue el instante en el que no tenemos más frío.
Faltan dos mil besos para la primavera y todavía no salí de la cama.
"Usted, en cambio, nieva, llueve,
sopla vientos helados y granizo.
Invierno, seré breve:
Pues el tiempo deshizo
con sus vientos, sus lluvias y su nieve,
el diablo que lo quiso se lo lleve."
"Usted,invierno", Jaime García Terrés.
viernes, 2 de julio de 2010
Un ratito
vos tendrías color suficiente para pintar
mis mañanas en sepia, mis noches de luto y mi pelo.
Sería más lindo mayo, más dulce la lluvia en febrero.
Y me quedo pensando qué vas a hacer con esos ojos.
Y porai me creo, me visto y te salgo a buscar.
Me sostienen canciones, cuarenta ladrones y el capricho de cantar;
Un rato de frío, la siesta, mis manos y un poco de sal de mar.
Te agradecen el fin de semana yo y mis problemas para descansar.
Armamos el final de los sueños mi insomnio, quien les habla y la oscuridad.
No cierres con llave, por dios te lo pido.
No vuelvas temprano, te espero dormido.
Vení y pasemos este invierno durmiendo en una gota.
Sentadito, fumando, espera contento este loco a su loca.
Yo sigo apagando este incendio: leyendo y escribiendo.
Bajo las persianas, te dejo durmiendo. Cuando pare de llover te despierto.
lunes, 28 de junio de 2010
José sabía
domingo, 27 de junio de 2010
Texto que escribí parado
Yo, principal responsable de mi insomnio, prometo prestarle máxima atención al normal desarrollo de mis pestañas y a la consumación de sus fantasías.
Con ánimo de envejecer embelleciendo, me propongo leer antes de dormir, consumir miel por lo menos dos veces por día, practicar mi firma y dibujar circulitos en algún papel mientras canto.
Desde ya, agradezco mucho a todos los artistas y colores que han influido en mi germinación compartiendo sentimientos y sabores sin mezquinar, y pido perdón a priori por mi amnesia selectiva estimulada por los caramelos.
Por último quiero comunicarles mi enorme deseo de reencarnar en una bufanda.
sábado, 19 de junio de 2010
Tres días
al mismo tiempo que se estremecen mis labios infectos de pasión procurando saciar mi apetito de poseerte. Y yo, desierto, sucumbo de pena.
- Por favor Torlo, no persigas este fardo de alucinaciones entusiastas que pretendemos definir como cariño. Los dos conseguimos augurar notoriamente las consecuencias.
- Oh Margo, que las sombras iluminas y los vendavales sosiegas. Tu que esperas la noche para volverla día y duermes soñando las fantasías de los inmortales, no me demandes que traicione mi sentir. Tú que has engalanado el eterno vacío de mi alma con una risa, permíteme amarte hasta que aliento únicamente sea mi existencia.
- Alto, detente vigoroso y serafín Torlo, que con tus palabras sueles engalanar lo que nosotros, estrictos acúmulos de carne y desdicha, podemos apreciar y descubrir con los ojos. Tu que das cuerpo y forma al lenguaje del espíritu, vete. Vete y no regreses más por estas tierras, aléjate tanto como puedas para que tu presencia en este mundo sea solo un mero recuerdo.
- Margo intentas desgarrarme acaso con palabras...
- ¡Corte! ¡Esperen!
Verónica haber si lo podes hacer con un poquito más de emoción por favor, más sentido, te están partiendo el alma, ponele corazón, si no, no se lo cree nadie. Bernardo ¿te podés sacar el casco de la moto por favor?
jueves, 17 de junio de 2010
Intervalle
lunes, 14 de junio de 2010
martes, 8 de junio de 2010
Serio
lunes, 7 de junio de 2010
Poiesis
Que aceptó que el amor era únicamente pena y tristeza.
Que creyó que la tristeza y la pena eran para toda la vida.
Que descubrió que la vida es amor.
Que aprendió que el amor es compartido.
Que entendió que lo que importa son las personas.
Que pudo escribir un poema.
Feriado (nunca más)
Te fuiste y hay ochenta y siete metros cuadrados hartos de mí.
Se quedó la pava anestesiada, pretendiendo calentar algo de agua. Soñando con chiflar.
Se durmieron las puertas, que no se abren del todo ni cierran con decisión.
Unas cuantas sillas y los tenedores decidieron irse, también.
Te fuiste y encontré luces que iluminan solo el techo, y rincones donde a la tarde llueve sin parar.
El sillón está insufrible, no quiere que nadie se le siente encima. Pregunta cuándo vas a volver, todo el tiempo.
Te fuiste y duermo más tarde la siesta. O duermo la siesta tres veces. Y a veces no duermo.
Tengo un solo pantalón presentable, medio par de medias subversivas y un escuadrón de remeras en oferta.
Te fuiste y entré en juicio con la heladera. Mis amigos intentaron tres o cuatro veces mediar por mí pero no da tregua. Insiste en que sólo hará declaraciones con vos presente.
Donde estaba la cama hay un proyecto de establecer un estacionamiento para pesadillas y monstruos, privado, sin ninguna ganancia para mí.
Te fuiste y el inodoro mostró su lado más humano. Es el único piadoso que me habla, en realidad es el único que me escucha.
En la habitación del fondo hay una sede del partido anarquista y la escena de un crimen por la que tengo prohibido transitar.
Te fuiste y ahora puedo cantar todo el día, pero nadie me puede escuchar.
Te fuiste y aprendí a silbar.
Pasaron pocos días, pero pasa tanto en un día.
Te fuiste, ¿vas a volver?
Te fuiste, se que por dos días, pero ya pasó uno.
Te fuiste, ¿podés volver?
Volvé ma.
sábado, 5 de junio de 2010
merma
Todos pasan, se sientan a mirar.
Hay un color que se destaca, o miles. Pero me genera otra emoción (si es que genera me algo). Otra sensación con respecto a la que me hubiese gustado presumir tiempo después, la impresión que quise venir a encontrar.
Vine para ver esto (entre otras cosas), pero, ¿cómo lo veo?
El distintivo de una época, de una opinión. Emblema inmortal. Llaveritos y estampas, gorros y bufandas. Himnos y retratos.
Pero, ¿qué veo?
Si, se impone sobre otros momentos, sobre otros horizontes que vi, pero no sobre otros sentimientos.
¡Hay! Si se encontrara al final de un sendero selvático o en la planicie de un valle inhóspito, quizás lo pudiera ver. ¿Si?
¿Acaso sea el frío lo que me desconcentra para comprender? O es solamente mi pueril forma de ser que entiende la tecnología y la arquitectura como ciencias cotidianas ausentes de calor y amor. ¿Qué es lo que hay que comprender?
Intuyo que me puedo pasar horas tratando de averiguar todo esto (o por lo menos de intentando conseguir un mero título para este momento). O en realidad ya sé todo desde el primer instante en que ponderé la vista sobre los demás sentidos.
Va, a medida que transcurre el tiempo, malgastando color, textura, olor.
Se hace más antiguo el paisaje y ya no me conmueve.
Pierde cada vez más tonalidad al mismo tiempo que concurrentes.
Vuelven a ecualizarse el resto de los sentidos, a estabilizarse. Y ya se diluyen las últimas tramas, las oblicuas, las paralelas, las mías, las de todos.
Una molestia (se le atribuye el término de basura generalmente) en el ojo izquierdo es un buen motivo para retirarme.
Fotografía: Matias Gotelli
viernes, 4 de junio de 2010
Pasayata I
La pasayata es un baile de tipo tradicional originario de Bolivia.
La palabra pasayata proviene del origen geográfico donde fue popularizado el baile, en la comunidad pesquera del río Yata (Bolivia). Este baile consiste en una deformación del Joropo (Venezuela) a diferencia que la pasayata no se baila en pareja.
Originalmente, en el mes de febrero los pescadores festejaban durante 3 días los éxitos y lamentaban los fracasos de la pesca anual. Se dice que en esta celebración eran frecuentes la representación de sacrificios de antaño y el chamanismo relacionado con las creencias del mundo sobrenatural, la meteorología, la siembre, la cosecha, etc.
La inclusión del típico baile venezolano, el joropo, en la comunidad yateña se dice que fue gracias a Héctor Remanso Quincepalos, un noble venezolano que recorrió las tierras extranjeras y se dice, pudo haber introducido el joropo en Bolivia.
Hoy en día la pasayata es conocida y practicada por diferentes comunidades en Bolivia y sus máximos exponentes son “Miriam Perelioso”, los “Quinchos Sin Paja” y el ex ministro de cultura chileno y orquesta de Vals “Todo-por-todo”
miércoles, 2 de junio de 2010
Dosmil veintipico.
martes, 1 de junio de 2010
El gallo cantonés
Ahora imaginemos el descubrimiento de un animal totalmente desconocido, con una “forma” radicalmente desconocida. Nueva por que antes no existía siquiera en el mundo de la imaginación de nadie.
Lo más importante sería que este animal tuviera pelos, y que estos pelos sean de un color que no sea muy común entre los animales. Por ejemplo el celeste, el violeta, el magenta, el verde aceituna o el gris brillante.
¿Alas? ¿Garras? ¿Trompa? No. Nada que ya preexista. Me inclinaría mas por alguna propiedad mecánica o física ignorada.
Extremidades elásticas, muchas de ellas. O solo una.
Una corona ósea encima del cráneo que presente cavidades orbitarias triangulares que contengan la cantidad de ojos necesarios para poder ver al mismo tiempo en todas las direcciones.
Un canal medular que no necesariamente tenga la disposición de columna, podría ser bien una “S” contorneada o un polígono.
¿Por qué los genes no nos sorprenden? ¿Existen seres vivos indocumentados, ignorados?
¿Nadie se aburrió tanto como yo de los animales que hoy conocemos? ¿A nadie le irrita como a mí la fauna con la que acostumbramos convivir?
Claro, si a nadie le importa, si nadie se preocupa siquiera por pensar que esto ocurra, nunca va a ocurrir. O acaso el agua no deja de ser líquida cuando nosotros queremos. ¿Acaso no creemos en lo que nos parece? ¿No inventamos reglas, normas, calendarios, riesgos, canciones, sillones, bebidas, nombres, aviones, pinceles, rutas, caleidoscopios?
¿No podemos buscar la manera de que haya animales más interesantes?
lunes, 31 de mayo de 2010
La intención apelmazada de ser pájaro
Buen día, día. Día, buen día.
Buen día, perro, mujer buen día.
Árbol buen día, señor buen día.
Buen día, hijo, hermano buen día.
Buen día, día. Día, buen día.
Soy todos tus olvidos
y de todos tus olvidos
aparece mi alimento.
Aquí tu libertad,
aquí tu intención
apelmazada de ser pájaro.
Aquí la piedra de tu risa.
Aquí... mi boca arriba y gritando
Buen día, a todo lo que pasa.
Yo soy el que da rota de tu paso olvidado.
Aquel que te camina,
descalzo entre tus pasos.
Nada sé, no. Nada sé...
Buen día, día. Día, buen día.
Buen día, sol, soles buen día.
Tontos buen día, señora buen día.
Buen día, aire, luna buen día.
Aquí tu libertad,
aquí tu intención apelmazada de ser pájaro.
Aquí la piedra de tu risa,
aquí mi boca arriba gritando: Buen día,
a todo lo que pasa.
Juntos cavaremos hasta la superficie de mi tierra.
Tu dolor es amor transformándose en mundo
y una caja es mi cuerpo donde el dolor no cesa.
Adentro mío;
Escarba hoy en tu mano tratando de
ubicarte en la cima.
Embelésate ahora que estas vivo.
Este mundo era ya una loqueria.
Vamos...adelante.
Llevaras todo junto,
llanura y vegetal entrelazado.
Agua sobre fuego y fuego bajo tierra.
Sé bien que tus coros se pondrán
contentos.
Vamos...adelante.
Que suba lo que crece.
Lo que se fue se vaya.
Aquí voy yo.
El que río y río
bajo y sobre las vertientes.
Aquí voy yo,
el que tentó al amigo.
Oíd, oíd, que hermoso ría que suena en ti
llamando, humano, humano, humano...
El pensamiento corre,
el cuerpo baila.
Los ojos iluminan.
La voz llega y escapa.
Por que trastocar la lozanía
que hay en tu alma?
Ah! La estridente coraza.
Oh! La enfrascadora jornada.
Brindo contigo, Holderlin.
Por lo gratis, al bendición etérea.
Y óiganse las manos serviciales.
La tares del amor,
creativo y fraternal.
Buen día, remanso, tempestad buen día.
Buen día, ruta, muerte buen día.
Buen día, día.
Ey! Y si hubieras contraído
compromiso con la muerte?
Y si hubieras muerto acaso?
Peleando o creyendo.
O intentando escaleras para atrapar las
espaldas del cielo?
Hubieras llevado gloria hacia allá
(hacia desde donde ya no se vuelve)
Pero también, hubieras dejado fábula,
utopía y polvo
entre mis cofrades mortales.
Pobre eres si no llevas repletas las arcas
de tu corazón.
Idiota perdido aquel que no se reconozca en un
odio insensato.
Que imbécil no verá su pasión mas
desjuiciada.
Y que clase de rico será
quien no lleve todo junto y en un solo puño
la psiquis y el latido de su pueblo.
Buen día, día. Día buen día.
Buen día estrella, humildes buen día.
Buen día cerca, lejos buen día.
Buen día, buenos locos buen día.
Buen día, mañana. Traición buen día.
Del último sueño vengo,
del último sueño soñado.
Han caído cortezas de mí.
Imperios han venido y desaparecido.
He comido el pan de la locura.
He sido cuerpos de otros cuerpos
y me he despertado en fiestas y caídas.
He sido celoso como mi ángel guardián
y paciente como las arañas.
Tanto he dormido en el azul barro del
invierno como he vuelto desde la blanca luz
de los ciegos del mundo desierto
entre cactus, reptiles y minerales.
Buen día, día. Día, buen día.
Mi joven realidad ya no se busca
en los reflejos de un espejo astillado.
No quiero ser un barco anclado
sobre un río tormentoso.
¡He venido a mover y darle
marcha a la fanfarria!
me fecunda la música que tonifica
el cura.
Los poetas me acusan de deber ser
valiente.
Las artes para siempre,
las musas sin cadenas.
Huelo, como vino, juego.
Me recuesto cara al cielo.
y mi reposo goza en la paz de cada origen.
Buen día, día.
Adiós barcos anclados sobre torrentosas aguas.
Adiós espejos astillados.
No nosotros, regocijo del rocío
sobre narices esplendidas.
No, no, no,
no nosotros
elásticos celebradores de deseos.
Buen día, día.
Buen día, futuro venturoso.
Buen día, día.
(Miguel Abuelo)
Arturo (Darío)
Arturo odia los sinónimos. El cree que cada cosa es suficientemente particular e individual como para tener otra palabra que la describa.
Arturo no discute, no examina las posibilidades ni defiende posturas. Habla.
Arturo cree que los puntos cardinales están de más. Piensa que decir arriba o abajo alcanza. Le gusta el signo de la rosa de los vientos le hubiese gustado que se usara para una religión o el símbolo representativo de un país, algo mas importante.
Arturo se despierta de noche. Hace ejercicios de matemáticas para inducir la producción de mielina, que es una sustancia propia del cuerpo humano que, según un mail que le llegó, acelera las sinapsis entre las neuronas y eso quiere decir que se puede pensar más rápido. No sabe si acelera las sinapsis matemáticas o las de cualquier pensamiento, es decir, acordarse todos los teléfonos de utilidad de memoria o las direcciones donde hay algún edificio público.
Arturo no tolera a sus vecinos, los cree inferiores. Los ve como bebés gigantes que no entienden su idioma, que son de otro color, de otra raza, otro gen, otra conformación, tienen otro funcionamiento.
Arturo a veces pasa mucho tiempo escupiendo. Le gusta la sensación de tener la lengua y las encías secas. No toma nada muy frío, ni muy caliente.
Arturo se llama a si mismo Darío. No le interesan los sobrenombres, pero no soporta que otro haya elegido su nombre. Siempre piensa en eso, pero no le molesta que lo conozcan como Arturo.
Arturo nunca vio una porno.
Pintura: Self-Portrait, Francis Bacon